L.H.O.N.: un repaso por lo nuevo de Illya Kuryaki and the Valderramas

L.H.O.N. (La Humanidad O Nosotros) es el nuevo disco de Illya Kuryaki and the Valderramas, el segundo desde su regreso en 2011, un álbum distinto, que conserva la esencia de IKV pero que presenta, a su vez, un planteo mucho más profesional y más adulto.

El trabajo discográfico que comenzó a grabarse en Avesexua, el estudio de Emmanuel Horvilleur, terminó mezclándose en Los Angeles y está compuesto y producido por el dúo, como en los viejos tiempos. 

L.H.O.N. propone una interesante variedad, es innovador, no sigue una línea sino que abarca una diversidad de estilos (algo "deforme", dirían Emmanuel y Dante), donde ningún tema se parece al anterior ni a las viejas épocas. Logra ser innovador pero manteniendo la esencia de IKV, pasando por momentos por demás románticos y sentidos, sin dejar de lado esa cuota de funk que los caracteriza. Cuenta con muchos temas orientados a lo melódico al estilo Spinetta (padre), con fragmentos que recuerdan su etapa en Invisible, se evidencian algunas influencias claras con una sola escucha, como las de Prince y algo de Stevie Wonder, y también guardaron un lugar destacado para los ritmos más latinos.

En 2012, "Chances" supo ser un gran regreso para un dúo que en Argentina no tiene comparación. L.H.O.N. refleja la evolución de IKV, que se decidió a dar un paso más adelante y acertó. Es bueno ver que el dúo nos presenta algo nuevo, superior a sus anteriores trabajos, tanto musical como líricamente. 

Desde lo lírico, la evolución es clara. Como acostumbran, siempre buscan dejar un mensaje positivo y de esperanza, pero esta vez lo llevan a un plano más adulto, más trascendente y no tan teen. Algo que refleja el crecimiento de la banda, de "los chicos" que ya no son chicos, y que se traduce en un profesionalismo digno de destacar. Siguen divirtiendo, siguen siendo "esos pibes simpáticos", pero esta vez fueron un poco más allá. Desde lo musical, se destaca también el trabajo de la banda que los acompaña, con excelentes músicos que lograron que nada fallara, especialmente Matías Rada en la guitarra y Carlos Salas en la percusión, además de muchos pasajes con intrumentos de viento y cuerdas que le dan un toque especial.

En esta ocasión, Emmanuel Horvilleur y Dante Spinetta, se avocaron a letras que apuntan mucho más a lo espiritual y a lo trascendente, rozando lo religioso, algo que percibe con sólo ver la lista de temas:

1. Aleluya

2. Gallo negro

3. Hombre libre

4. Sigue

5. Ey, Dios

6. Los ángeles

7. Estrella gugaz

8. Ritmo mezcal

9. África

10. Espantapájaros

11. El árbol bajo el agua

12. Diciembre

13. Mi futuro

Un repaso por la lista de temas:

"Aleluya", la primera canción del disco, nos da la pauta de que este trabajo discográfico ya arranca bien. Probablemente ésta vaya a ser una de las favoritas de los fans de antaño.

El segundo tema, "Gallo Negro" ya era conocido. Fue el primer corte de difusión del disco, presentado en principio con un lyric video el 12 de febrero, habiendo superado el millón de visitas hasta la semana pasada, cuando finalmente se hizo público su video oficial. El video, en gran parte inspirado en The Warriors, película de Walter Hill, con una estética asimilable a la de las pandillas de motoqueros (particularmente los de la costa este de Estados Unidos, los Hell's Angels), mezclado con una imagen más latina de los suburbios del Bronx de Nueva York. Con sus melodías selváticas y su estética al mejor estilo Tarantino, fue un éxito desde el minuto uno.

"Hombre Libre" constituye ese grito de rebeldía, ese plantarse afirmando que nadie puede quitarte lo que sos: humano y único. "Cuatro paredes nunca pudieron con un soñador", dice la letra mientras la música nos invita a bailar.

La cuarta canción del disco es "Sigue", la primera de cuatro baladas al hilo. Es un tema que también habíamos escuchado como adelanto hace unas semanas con un lyric video y su presentación en el Lollapalooza 2016. Probablemente esté dedicada a Luis Alberto Spinetta (y pensándolo detenidamente, gran parte del disco tiene su impronta). Esta canción cuenta también con la participación de la orquesta filarmónica de Praga, dándole un toque melódico (más) especial. 

"Ey, Dios", es otra balada que no sólo cumple sino que sorprende. Cuenta con la participación especial de Natalia Lafourcade, a cargo de nada más y nada menos que el estribillo de la canción. Una colaboración que encajó perfecto. 

Llegando a "Los Ángeles", afirmo que si bien nunca se discutió el ensamble perfecto que conforman Emma y Dante, esta canción llega en ese momento del disco en el que lo único que podés pensar es: "¿cómo puede ser que estos tipos se hayan separado alguna vez?" Musicalmente es fabulosa y es el fiel reflejo de esa unidad entre Dante y Emma que ya es más que una hermandad de alma. Un tema perfecto.

"Estrella Fugaz", la otra canción que cuenta con una colaboración especial, en este caso de Miguel, es definitivamente uno de los puntos más altos del disco. También la conocimos con un video hace tres semanas y fue presentada en el Lollapalooza junto al invitado de lujo. Está ubicada exactamente en la mitad del disco, siendo la antesala perfecta al tramo más movido; la calma antes del huracán.

Arranca la parte más funk del L.H.O.N. de la mano de "Ritmo Mezcal", ya presentada en el show del Lollapalooza, donde Emma afirmó, sin equivocarse, que "the funk is recontra back". Y sí, muchachos, ésta es la prueba. La versión de estudio es muy buena y ya hemos comprobado la aceptación instantánea del público en vivo. Para los más funkeros ésta va a ser probablemente una de las favoritas del disco (junto con la primera), esa canción que te mantiene bailando, cantando, sonriendo. Abandonaron en este caso, sólo por un momento, esas letras más cargadas de espiritualidad para hacerle un espacio  a los placeres más terrenales, a "la fiesta con IKV".

Sigue la lista con "África", en la misma sintonía que la antecesora, para afirmar que "es tiempo de activar" de la mano de los "soldados del imperio del funk". Una curiosidad: en noviembre de 2015 habían compartido en las redes sociales un pedacito instrumental de "lo nuevo". Para los despistados, ésta era canción.

"Espantapájaros" se presenta para volver a bajar un poco los decibeles y es un tema... Excelente. Es difícil poner en palabras lo que han hecho acá. Alcanza un nivel superior a todo lo que hayan hecho con anterioridad. Es letal, y todavía falta, para mí, el punto más alto del disco con lo que sigue.

"Diciembre" cumple, es una canción bonita que anticipa lo mejor, que llega de la mano de "El Árbol Bajo El Agua". A esta altura el disco ya era un 8 y se convierte en un 10 sólo por esta canción. Es clarísima la influencia de Luis Alberto Spinetta, quizás consecuencia de la participación de Dante en la edición de Los Amigo, el disco póstumo de su padre. Esta canción deja de ser un homenaje para pasar al plano del alumno que aprendió a la perfección, del mejor maestro. 

El cierre perfecto llega de la mano de "Mi futuro", una canción ni tan melancólica, ni tan fiestera, con un estilo asimilable a la época de Luis en Invisible. En síntesis, es perfecta para el cierre del disco, ya que resume todos los estadíos musicales recorridos.

Si todavía no lo escucharon, L.H.O.N. ya está disponible en Spotify y en las disquerías de todo el país.

Publicado por Celeste Parrella